No me gustó El exorcista: Creyentes porque es “otra pelïcula (mala) sobre exorcismo” donde jamás le creés a las niñas poseïdas y menos al resto. Dejen los clásicos en paz.
Me gustó Black Rabbit porque es una serie que no para un segundo, no te da respiro, cada acto tiene una nueva y brutal consecuencia. Excelente. En Netflix ahora.