Me gustó La mentira original porque tiene una premisa muy original y por la forma en la que se vuelve una crítica al catolicismo, con Ricky Gervais que es crack para eso.
Me gustó Demon Slayer: Kimetsu no Yaiba Castillo infinito porque es maravilloso como adaptaron esta parte de la historia a la pantalla, con una animación estupenda y un maravilloso trabajo de producción.